Ansiedad en los usuarios que egresan de la Unidad de Cuidados Intensivos.

Abstract

Introducción: El ambiente de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) puede afectar de manera negativa en la salud mental de los usuarios ya que estos deben abandonar temporalmente, parcialmente los roles o actividades que desempeñaban debido a la enfermedad tomando un nuevo rol como paciente que será pasivo y dependiente totalmente del equipo multidisciplinario y la estructura de la UCI.

Objetivo: Determinar la prevalencia de ansiedad de los usuarios egresados de la Unidad de Cuidados Intensivos.

Material y métodos: La presente investigación es de tipo cuantitativa que consiste en un proceso riguroso, metodológico, preciso y objetivo con la finalidad de recabar información con datos numéricos sobre un objetivo en particular, por lo que esta investigación, permite conocer datos sobre la ansiedad en usuarios que han egresado de la UCI. Los estudios recabados fueron de tipo descriptivo, observacional e informativo, el tipo de muestreo seleccionado para esta investigación fue de tipo cuantitativo no probabilístico por conveniencia para la investigación. La muestra estuvo constituida por usuarios mayores de 18 a 85 años con una estancia en una unidad de cuidados intensivos superior a 48 horas en un Hospital de Tercer Nivel, que egresaron de la Unidad de Cuidados Intensivos cuyo internamiento se dio por diferentes causas y que se encontraran dentro de las mismas instalaciones del hospital o egresado a su domicilio en un tiempo no mayor a 6 meses.

Conclusión: La calidad de vida tiene un impacto negativo después del egreso de la unidad de cuidados intensivos, especialmente en aquellos pacientes mayores de 80 años. Las dimensiones más afectadas son dolor/malestar, ansiedad/depresión, falta de sueño, irritabilidad y fatiga. Los pacientes egresados de la UCI aún presentan un alto porcentaje de reinserción incompleta, por encontrarse convalecientes. Todo ello acompañado de gran impacto y sufrimiento psicológico que no podemos subestimar dada su influencia en la recuperación/supervivencia del paciente. La colaboración con psicología es minoritaria y debe ser potenciada para conseguir un manejo integral del paciente crítico.